Elecciones de EE.UU. y las implicancias del triunfo de Donald Trump

Un nuevo mandato de Donald Trump en 2025 tendría implicaciones importantes para la política interna de Estados Unidos y la geopolítica mundial. Este es un resumen del PDF adjunto que es un análisis de los principales aspectos e implicancias globales de un segundo gobierno de Donald Trump, a nivel globale.

 

Lo que es indispensable considerar en el análisis es que siempre detrás de todo gobierno estadounidense (La Administración) existe un Estado Profundo e importantes Factores de Poder Interno Permanentes que inciden en las políticas de los gobiernos de cualquier signo, mas allá de mayor o menor relacionamiento o empatía existente entre ellos en la fase eleccionaria previa. 

 

Es muy superficial y un pensamiento muy precario creer que lo que hará Donald Trump en su gobierno solo dependerá de su voluntad.

 

Será importante la impronta de gobierno que Donald Trump le imprimirá a sus gestión, pero no menos importante será la incidencia o el papel que jugaran tanto el Estado Profundo y como los Factores de Poder Interno Permanentes. A lo cual hay que sumarle además, que la acción final será la resultante que se defina en función de la interacción con otros factores de poder externos, tanto de aliados (Europa, Japón, etc.) como de adversarios del hegemonismo yanqui (China, Rusia, Sur Global)

 

Factores de Poder Interno en EE.UU.

 

El "Estado Profundo"

 

El concepto de "Estado Profundo" hace referencia a la influencia de ciertos sectores de poder en EE.UU. que, según los analistas, operan con cierta independencia de la administración elegida. Este "Estado Profundo" incluiría agencias de inteligencia como la CIA y el FBI, el complejo militar-industrial, la burocracia permanente, lobbies y corporaciones, y medios de comunicación y think tanks que moldean la política y la opinión pública.

 

Durante un segundo mandato de Trump, estos sectores probablemente continuarán interfiriéndose en políticas que consideran contrarias al statu quo, y a sus intereses de seguridad, control económico y dominancia global. Su influencia podría limitar algunas de las políticas de Trump, especialmente si van en contra de los intereses globales y financieros de EE.UU., tal como sucedió durante su primer mandato.

 

Sectores de Poder Permanente

 

Entre los principales sectores de poder se destacan:

 

1.            Wall Street: Interesado en la globalización financiera, podría beneficiarse de la desregulación y reducción de impuestos, pero se enfrentaría a conflictos con el proteccionismo de Trump.

2.            Complejo militar-industrial: Fomentaría una "militarización estratégica" sin intervenciones largas, apoyando un mayor gasto militar y ventas de armas a aliados estratégicos.

3.            Sector tecnológico (Silicon Valley): Mantendría una relación compleja con Trump debido a políticas restrictivas contra China que afectarían su expansión global.

4.            Sector energético: Sería un aliado clave de Trump debido a su enfoque pro-combustibles fósiles, con un impacto negativo en la transición energética.

5.            Sector fabricante: Se beneficiaría de políticas proteccionistas y de repatriación de producción, aunque esto podría generar tensiones con otros países.

 

Política Exterior y Geopolítica

 

Relaciones con Europa y la OTAN

 

Trump podría presionar a los países europeos para que asuman más carga en la OTAN y en su seguridad. También se prevé una reducción de su compromiso con Ucrania, delegando más responsabilidad a Europa en el conflicto. Esta estrategia de menor involucramiento multilateral y mayor bilateralismo generaría tensiones con líderes europeos que defienden la cooperación internacional.

 

Relaciones con China y Rusia

 

Con China, un segundo gobierno de Trump intensificaría la guerra comercial y el desacoplamiento económico. La estrategia se centraría en bloquear la influencia china en el Indo-Pacífico mediante alianzas con países como Japón y Australia. En cuanto a Rusia, Trump podría adoptar un enfoque pragmático, limitando el apoyo a Ucrania y buscando cierta estabilidad con Moscú, aunque esto podría generar conflictos con la política interna estadounidense y con los aliados europeos.

 

África y el Nuevo Pragmatismo

 

En África, Trump probablemente reduciría el financiamiento de ayuda al desarrollo y buscaría acuerdos bilaterales que beneficien a las empresas estadounidenses en sectores como energía y minería. Esto reflejaría su enfoque de "América Primero" y abriría la puerta para que potencias como China y Rusia aumenten su influencia en el continente, dado que EE.UU. reduciría su papel en organizaciones multilaterales como la Unión Africana y el Banco Africano de Desarrollo .

 

Impacto en América Latina: Economía, Diplomacia y Comercio

 

Dependencia Económica y Reducción de Financiamiento

 

Trump podría reforzar la dependencia económica de América Latina hacia EE.UU., ofreciendo incentivos en infraestructura y energía a países alineados políticamente, mientras limita el financiamiento a gobiernos de izquierda. Su postura anti-China buscaría que los países latinoamericanos reduzcan sus vínculos con Beijing, especialmente en sectores estratégicos como infraestructura y tecnología.

 

Política Migratoria y Reducción de Remesas

 

Se anticipa que Trump adoptará políticas migratorias más restrictivas que afectarían a los países centroamericanos y a México, reduciendo el envío de remesas y el acceso de mano de obra migrante. Esta medida tendría un impacto negativo en la economía de estos países, que depende en gran medida de las remesas enviadas desde Estados Unidos.

 

Alineación Diplomática y Aislamiento de Gobiernos de Izquierda

 

Trump podría fortalecer su relación con gobiernos de derecha en América Latina, promoviendo un bloque de países aliados y aislando a los gobiernos de izquierda, como los de Venezuela, Cuba y Nicaragua. Esto podría traducirse en sanciones adicionales y menor apoyo diplomático a estos países, buscando una alineación regional con EE.UU. y promoviendo un distanciamiento de China y Rusia.

 

Política Comercial y Renegociación de Tratados

 

Trump podría modificar políticas comerciales como la Ley de Oportunidades y Crecimiento de África (AGOA) y el T-MEC (Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá), buscando términos más favorables para EE.UU. Asimismo, podría promover más acuerdos bilaterales con países de América Latina, en detrimento de tratados regionales que benefician a la región en conjunto.

 

Esta postura aumentaría la competencia entre productos de EE.UU. y productos locales en Latinoamérica, en sectores como agricultura y manufactura, afectando a los productores locales y generando una mayor dependencia de la economía estadounidense.

 

Caso Especial: Argentina bajo el Gobierno de Javier Milei

 

El potencial alineamiento entre Trump y Javier Milei en Argentina, basado en la afinidad ideológica y el enfoque liberal, podría consolidar una relación pro-EE.UU., especialmente en temas de economía y seguridad.

 

Reformas Económicas y Dependencia del FMI

 

Milei podrá contar con el respaldo de Trump para impulsar reformas económicas profundas de corte neoliberal que ya viene haciendo en Argentina, como la desregulación de sectores estratégicos, la privatización de empresas estatales y una reducción del Estado. Esto facilitaría la alineación con el FMI y la entrada de inversión extranjera, especialmente en sectores como el gas y la minería. Sin embargo, estas reformas podrían profundizar la desigualdad y aumentar la conflictividad social.

 

Diplomacia y Alineación Anti-China e Irán

 

Bajo la influencia de Trump, Argentina podría reducir su relación con China y alinear su política exterior con Washington, limitando las inversiones chinas en infraestructura y tecnología en el país. Esto fortalecería el frente común contra China e Irán en la región, alineando a Argentina con los intereses estratégicos de EE.UU. y debilitando sus relaciones con potencias emergentes.

 

Polarización Política y Aumento de la Tensión Social

 

La postura alineada de Milei con EE.UU. podría intensificar la polarización en Argentina, con la oposición y sectores nacionalistas resistiendo a un gobierno percibido como subordinado a los intereses estadounidenses. Esto podría fortalecer los movimientos antiimperialistas y generar una división en el país entre quienes apoyan una mayor apertura al capital extranjero y quienes defienden la soberanía nacional.

 

Conclusión

 

Un gobierno de Donald Trump en 2025 tendría una influencia significativa sobre una Argentina gobernada por Javier Milei , debido a las afinidades ideológicas entre ambos líderes y especialmente por la subyugación mental de Javier Milei por EE.UU. y Donald Trump.

 

Las áreas de impacto incluyen posibles beneficios en inversión extranjera y comercio; la diplomacia, con un acercamiento a EE.UU. y una postura anti-China e Irán; la política interna, donde Trump legitimaría las políticas neoliberales de Milei; y la geopolítica, con una alineación más estrecha hacia los intereses de EE.UU. en América Latina.

 

ARIEL ROLFO  

7/11/2024

 

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